Trabajadores de la Biblioteca Argentina denuncian excesos de la seguridad del lugar
Los trabajadores denuncian la saturación de la policía en el ambiente de la biblioteca y repetidos hechos de maltrato y violencia. “Ahora está custodiando la policía provincial (al terminarse el contrato con la empresa privada) y los chicos o jóvenes en situación de calle que tratan de entrar en la Biblioteca en general son separados y perseguidos con violencia”, asegura una de las trabajadoras.
Trabajadores de la Biblioteca Argentina Dr. Juan Álvarez atraviesan diferentes problemas con las fuerzas encargadas de la seguridad desde hace unos meses. Históricamente el reclamo por la seguridad vino de la mano de contratos con agentes privados que se apostaban en la entrada y salida de la Biblioteca, algo que cambió en último tiempo: “Ahora está custodiando la policía provincial (al terminarse el contrato con la empresa privada) y nos encontramos con que los chicos o jóvenes en situación de calle que tratan de entrar en la Biblioteca son separados y perseguidos con violencia”, asegura una de las trabajadoras.
Los trabajadores denuncian la “saturación de la policia” en el ambiente de la biblioteca y repetidos hechos de maltrato y violencia para con los “trapitos” que usan los baños o hacia los chicos en situación de calle que llegan hasta ahí, por ejemplo, para usar internet. “El reclamo histórico de seguridad jamás apuntó a que se realicen excesos y evidentemente no asegura la tranquilidad. Los maltratos a niños suben cada vez más de tono y se repiten episodios que son preocupantes. El trato con las personas debe ser cordial, con buenos tratos, sobre todo con chicos que necesitan contención”, explicó la compañera.
A la par, se denuncia que se ha restringido para los pequeños el uso del locutorio público, de los baños y del acceso a la sala de lectura tanto infantil como a la general, “lo que de ninguna manera debe pasar”.
“Los jóvenes y los chicos, en general hacen caso cuando les pedimos algo, pero si un policía te insiste con salir del lugar y no te dejan entrar más, es muy difícil que un chico tenga un buen registro de una biblioteca pública. ¿Y no se trata de una prioridad la de proteger a la infancia?”.
“Es difícil mentalizar que este es un espacio público y de uso común, donde el estado es el garante de nuestra seguridad, cuando una persona armada amedrenta y no asegura nada. A nadie se le puede privar el ingreso a este establecimiento que debería contar con dispositivos de contención para situaciones particulares como estas”.
Desde ATE Rosario exigimos una urgente reunión con la Directora de la Biblioteca Argentina Dr. Juan Álvarez, Liliana Romero, para que normalice la situación y se prevea a tiempo cualquier tipo de situación violenta.
*Equipo de Comunicación ATE Rosario.