Lifschitz desmerece la dignidad de los trabajadores
El gobernador de la provincia se anticipó para descartar la posibilidad de un bono a fin de año, del mismo modo que negó la reapertura de la discusión. Todo ello en un contexto donde el salario mínimo para los trabajadores y trabajadoras santafesinos alcanzado en la última paritaria -con porcentajes engañosos y a la baja- está muy lejos de los $20.132,30 que necesita una familia para subsistir.
Luego de la sugerencia del Ministro de Economía de la Nación, Alfonso Prat-Gay, sobre un posible bono de fin de año para los trabajadores con salarios más bajos, el gobernador provincial, Miguel Lifstchitz salió inmediatamente a atajarse y descartó la posibilidad de un bono. Ni hablar, por supuesto, de una reapertura de paritarias, tan necesaria para todos los trabajadores y todas las trabajadoras santafesinas.
Desde abril que los estatales estamos exigiendo la reapertura de paritarias. Ya antes, en marzo, denunciamos la “paritaria trucha”, porque percibimos un porcentaje de aumento mucho menor a lo publicitado por el gobierno y nuestros paritarios. Y por eso desde agosto retomamos aún con más fuerza la campaña por la reapertura urgente de la paritaria, a sabiendas de que nuestros salarios, como los de todos los trabajadores, se vieron duramente castigados por la inflación y los tarifazos. De hecho, los $10.060 del salario mínimo para los trabajadores y trabajadoras de la provincia alcanzado en la última paritaria, está muy lejos de los $20.132,30 que establecen los compañeros de la Junta Interna de ATE Indec.
Pero ni nuestros paritarios del Consejo Directivo Provincial de ATE, encabezado por Jorge Hoffmann, ni el gobierno se hicieron eco de nuestros reclamos por la reapertura de la paritaria salarial. Y ahora, ante la apresurada negativa del ejecutivo santafesino sobre un bono de fin de año, en lugar de ponerse al frente del la lucha, Hoffmann asegura que “todavía falta mucho para fin de año”.
Hemos pasado buena parte de este 2016 reclamando por un aumento de salarios para los estatales y sabemos que los tiempos se acortan y que mes a mes es más difícil para cada uno de nosotros llegar a fin de mes. Para el final de este año tan duro para todos los trabajadores no falta nada. Y las declaraciones de Hoffmann nos hacen dudar de que viva en esta provincia, en este país o incluso en este planeta. O, al menos, está claro que no escucha los reclamos y las necesidades de las trabajadoras y los trabajadores a quienes dice representar. De hecho, el CDP no sólo no se sumó sino que militó en contra de todos los paros y otras medidas de fuerza que llevamos adelante desde ATE a nivel local, provincial y nacional.
El año pasado, ya desde noviembre advertíamos que no alcanzaba con “pasar el verano”, como había anunciado el entonces gobernador electo, y reclamábamos el pago de un bono de fin de año de $3.000 para trabajadores activos y jubilados, que Miguel Lifschitz jamás hizo efectivo. Hoffmann tampoco salió a encabezar esa pelea, ni siquiera dijo una palabra.
Con esa experiencia, no podemos esperar ni un día más para reclamar lo que nos corresponde. Seguimos diciendo que es absolutamente necesaria una reapertura de la paritaria salarial para alcanzar un piso de dignidad en los ingresos de los trabajadores del Estado santafesino. Y también exigimos desde ahora un bono de fin de año que sea acorde a nuestras necesidades.
La paritaria de marzo claramente no alcanzó y no podemos esperar hasta abril para volver a discutir cuánto tenemos que ganar los trabajadores para mantener a nuestras familias sin caer en la pobreza. Con estas consignas claras, mañana paramos y nos movilizamos a la ciudad de Santa Fe, para manifestarnos frente a la Casa de Gobierno y exigir lo que nos corresponde. Esperamos que esta vez Hoffmann y el CDP se unan a este reclamo y dejen de darle la espalda a todos los estatales.