Guardapolvos llenos de bronca
Este miércoles, con desobligación mediante, trabajadorxs dependientes de los ministerios de Salud y Educación afiliadxs a ATE Rosario se manifestaron en Laprida y Rioja. Exigieron continuidad laboral, condiciones de trabajo, creación de cargos, inversión en las áreas mencionadas, salarios dignos, entre otros puntos.
Ser ‘contrato Covid’. Ser un profesional, con formación, que en un momento inédito a nivel mundial sale a la cancha en el sector más expuesto a una pandemia sin precedentes. Ser un ser humano que pasa de firmar un contrato, a ser monotributista, a otra forma mediante la cual se le niegan derechos laborales. Eso sí: nunca deja de trabajar.
Así vivieron los dos últimos años alrededor de dos mil compañerxs de salud, sin saber qué pasaba con su continuidad en ocho días. Ser ‘contrato Covid’, es experimentar una exposición sanitaria proporcional a la incertidumbre laboral. “Desde ATE Rosario reclamamos que tengan continuidad laboral, ya que en salud no sobra nada ni nadie”, dijo la Secretaria General del sindicato, Lorena Almirón.
En ese camino, la exigencia del escalafonamiento en salud, la concreción de pases a planta, dado que hay en todos los lugares, tanto Centros de Salud como Hospitales, de dos a cuatro personas que han quedado afuera de los pases a planta. “Se trata de interinos y monotributistas, que si no le reconocen la continuidad laboral en salud, estamos complicados”.
A modo común, lxs provinciales marcaron la necesidad de la reapertura de la paritaria salarial, previo adelantamiento inmediato de las cuotas previstas, como se ha hecho en otras provincias y en el mismo municipio local. “En otras provincias ya se piensa o se firmó un aumento salarial de un 60 o 70% porque al salario se lo come la inflación que continua y la situación es realmente grave”, expuso Almirón. ATE Rosario exige un salario mínimo que iguale a la canasta familiar, hoy ubicada en los $160.000 y la actualización inmediata de las asignaciones familiares –que son de las más bajas del país-.
En Educación, hay 300 cargos que están faltando. “Por eso acá estamos con los compañeros de educación porque decimos que defendemos la unidad y defendemos las condiciones de trabajo. Si falta personal hay una sobrecarga laboral, tanto en salud como en educación, que parece que necesitan un presupuesto mayor por las tareas que realizamos todos los días”, apuntó la dirigenta.
Dentro del pliego reivindicativo hay reclamos tan viejos como vigentes, lo que marca una desidia sostenida en la política pública. “Hablamos de cosas graves, insostenibles: problemas de infraestructura, falta de gas en las escuelas, comedores con bajo presupuesto, falta de cargos, necesidad de recategorizaciones, centros de salud con problemas edilicios serios”, enumeró.
Mirando los datos económicos, con una inflación del 5,1% mensual y una interanual acumulada del 64,2%, la provincia de Santa Fe no obstante presenta superávit. “En esta provincia plata hay, el tema es para qué se usa el superávit del que se vanaglorian”, analizó la dirigenta. Y convocó a “atender los reclamos de forma inmediata porque en los lugares de trabajo y en la atención de las necesidades mínimas, la situación es insostenible”.
Equipo de Comunicación ATE Rosario