Homenaje a Quagliaro, “un prócer del movimiento obrero”
El viernes 22 se realizó en ATE Rosario un homenaje al dirigente rosarino Héctor “El Colorado” Quagliaro, en un nuevo aniversario de su nacimiento. Con la presencia de familiares, amigos y dirigentes políticos y sociales, el recuerdo se enlazó con su legado para el presente.
El 22 de junio Héctor Quagliaro hubiera cumplido 85 años. Por ello, para celebrar la vida de este histórico dirigente rosarino, se realizó un acto en la sede de ATE Rosario, en el salón que lleva su nombre. Allí se reunieron familiares, amigos, dirigentes sindicales, políticos y sociales para recordarlo pero, también, para retomar su legado para el presente.
Entre quienes estuvieron presentes, junto a trabajadoras y trabajadores de diversos sectores, se destacó la presencia de la familia Quagliaro; de Víctor De Gennaro, dirigente de Unidad Popular (UP); Oscar “Cacho” Mengarelli, presidente del Centro de Jubilados Nacional de ATE; militantes de la UP de otras localidades, como Marcelo Cortés, de Villa Constitución, y Natalia Nieto, de Pérez; Lucho Molina del PCR; Gustavo Martínez, Secretario General de la CTA Autónoma de la provincia de Santa Fe; Néstor Suleiman, referente de la Federación de Entidades Argentino Árabes; el historiador Miguel Catalá; y el concejal mandato cumlido Miguel Ángel Zamarini. Tambiés se recibieron las adhesiones de los diputados provinciales Carlos Del Frade, Mercedes Meier y Rubén Giustiniani.
El Secretario General de ATE Rosario, Raúl Daz, fue el encargado de dar la bienvenida. Para él, “en este momento político los trabajadores, las trabajadoras, el movimiento social, popular, la está pasando realmente muy mal, pero a pesar de las adversidades políticas que vivimos hoy, siempre tiene que haber un espacio para el encuentro, para pensar que lo colectivo no está perdido. Son momentos también de mucha resistencia política y ahí el legado de Héctor cobra vigencia una vez más. Recordarlo el día de su nacimiento es importante porque expresa lo que es la vida y cómo se siente, en función de los intereses de la clase trabajadora”.
“Estamos hablando del conductor de los rosariazos, que fue mi padre político, el que le dio conciencia política a los jóvenes de ATE de los años 70”, definió Mengarelli, entrevistado antes del acto. “Héctor nunca traicionó sus convicciones, peleó contra (Juan) Horvath, fue la figura fundamental para que un grupo de jóvenes nos juntáramos, hiciéramos ANUSATE y recuperáramos el gremio de manos de la burocracia, con el paso por la militancia clandestina en tiempos de la dictadura militar. Él era el corazón de todo eso. Estamos hablando de un prócer del movimiento obrero, un dirigente que convencía con su humildad, gobernaba con su ejemplo”, aseguró.
Por su parte, De Gennaro afirmó que, además de extrañarlo, está “agradecido porque fue un puente con la historia del movimiento obrero argentino y con el orgullo de clase que nos enseñó a tener con su ejemplo, con su docencia y su militancia. Agradecerle la potencialidad de hacernos volar, soñar y concretar. Tuvo la generosidad de abrirnos las puertas creyendo y apostando a una transformación colectiva”.
Para dar vuelta la taba
La hija del Colorado, Leticia Quagliaro, quien también es referente local de la UP, remarcó su faceta frentista: “propulsor de armados plurales, de convocar a hombres y mujeres de distintos espacios”. Para ella, “en este año que está siendo durísimo para el pueblo en general y para los trabajadores del Estado en particular, hay que recordar esa faceta porque solo en unidad en la diversidad vamos a lograr dar vuelta la taba. A nadie le sobra nada, tenemos que salir a buscar a los compañeros que todavía no están. Recordar a un tipo que convocaba a distintos espacios sindicales, sociales, culturales, de derechos humanos. Él no solamente fue un dirigente sindical sino que fue un militante social, político, que nunca renegaba de lo que era y su origen, y no invalidaba a ningún compañero por su procedencia y por su ideología. Esa faceta tiene que ver con los tiempos que corren y es la mejor forma de honrar su memoria”.
En el mismo sentido, Mengarelli apuntó que “esta ética finalmente se volverá a imponer. Nos hace falta una propuesta unificadora de la clase como para recuperar la capacidad ofensiva y salir de la defensiva”.
También trayendo su legado al presente, De Gennaro hizo referencia a una de las frases más famosas de Quagliaro: “ese sentimiento que tenía de que podía soñar que miles de compañeros que no conocíamos iban a usar una herramienta que estábamos construyendo y éramos 20, devenía de la fortaleza de conocer que las derrotas existen pero también que las victorias se construyen y que nuestro pueblo tiene una rebeldía que no va a parar, que va a enfrentar esto y que habrá días de nuevas victorias, que ojalá sean para siempre. Esta pulseada se termina construyendo una nueva sociedad”.
* Equipo de Comunicación ATE Rosario