Macri, tres años gobernando con la mentira
En 36 meses de gobierno la recesión superó al crecimiento, la inflación trepó un 120% y la devaluación de la moneda llegó al 390%. Por Alejandro Asís.
“La inflación se puede resolver de manera relativamente fácil si se trabaja desde el primer día con seriedad y no mintiendo", profetizaba Mauricio Macri, cuando en tiempos de su campaña presidencial prometía bajar, en dos años, la inflación a un dígito.
Sin embargo, a pocos días que se cumplan tres años de mandato, la realidad indica que en todo el recorrido de su presidencia no ha parado de mentir. De aquellos promesas de crecer 20 años seguidos a esta realidad con una estrepitosa caída en la actividad economía y un recorte este año que se estima en 2,6% y llevándola a los mismos niveles de 2011. Y un dato inobjetable, cuando a fines de diciembre se cumpla el mes número 37 en el gobierno, el indicador del INDEC registrará que han sido más los meses en recesión que en crecimiento: 19 a 18.
Tampoco hubo aciertos en cuanto a aquella búsqueda de “previsibilidad” en la inflación. Si en campaña se hablaba de acercarla a los parámetros inflacionarios que rigen en el mundo, la realidad marca que sólo en el último mes de septiembre la inflación argentina trepó un 6,5%, casi duplicando a la inflación de todo un año que van a tener países americanos como Colombia, Chile, Paraguay o Perú.
El PBI se ha desmoronado con la depreciación del peso. ¿Incapacidad u objetivo? Tal vez haya mucho de ambas cosas. De lo que no quedan dudas es que en estos 3 años de gobierno los únicos ganadores con “el modelo” han sido los sectores agroexportadores, los sectores ligados a los servicios, el sector financiero y bancario, y los vinculados al extractivismo, como la energía petrolera y la minería.
Otro dato concluyente es que el gobierno no ha dejado de mentir en ninguna instancia. Ejemplos sobran: decir que en Argentina existen muchos impuestos que hacen regresivo el crecimiento económico e inmediatamente modificar el presupuesto nacional con la creación de nuevos impuestos, sumando presión a la ya asfixiante carga impositiva que sufren pymes, sectores productivos y la población argentina.
Así la mentira ha sido la razón del discurso que lo catapultó a la presidencia y que luego de 3 años de Macri ha sido un modelo de su gestión. Debajo se reproducen algunas de las promesas que el gobierno ha incumplido:
- “Vamos a crear trabajo, cuidando el que tenemos”: Esta definición ha sido absolutamente falsa. A fines del 2015 la desocupación general orillaba el 6,6%, la última medición muestra que subió 3 puntos ubicándola en torno al 9,6%, la tasa más alta de los últimos 12 años.
- “Pobreza cero”: Sólo en el último informe anual del INDEC la pobreza subió otros 2 puntos, alcanzando al 27,3% de la población y con alta probabilidad de que en la próxima medición pegue un salto asignificativo.
- “Vamos a bajar la inflación a un dígito”: La inflación lleva acumulada en estos 3 años más de un 120%, y hoy es uno de los cinco países con más alta inflación de todo el mundo.
- “No va a haber ningún adulto mayor en la pobreza”/“Los jubilados alcanzarán el 82% móvil”: Falso. Desde diciembre del 2017, con la modificación de la ley de jubilaciones, a diciembre 2018, se calcula que las jubilaciones del sector perderán más de 20 puntos, sin contar allí la quita de subsidios a medicamentos, recorte de pensiones, entre otras de las que fueron beneficiarios los jubilados.
- “No vamos a devaluar”: Un gran caballito de su campaña fue negar cualquier instancia de devaluación. Sin embargo desde que asumió el valor de nuestra moneda ha sufrido una pérdida del 390% (10 pesos- diciembre 2015- 39 pesos- hoy-), producto del enorme beneficio otorgado, por un lado a los sectores exportadores del área agrícola, empresas energéticas y de combustibles, y por otro a los sectores que juegan “timba financiera” que en este lapso de gobierno han sacado del país más de 100.000 millones de dólares: Sólo este año el peso argentino ha sido la moneda más devaluada del mundo con una caída cercana al 100%, respecto al valor de diciembre 2017.
- “No habrá ajustes sino que vamos a expandir la economía”: En 3 años de gobierno se ha pasado por todo tipo de ajustes. Despidos de trabajadores estatales, recorte a jubilaciones, recortes presupuestarios en áreas esenciales y hasta el último y más reciente en la búsqueda del llamado “déficit cero” que a poco de ser inaugurado está provocando el quebranto de Pymes que no pueden hacer frente al costo de los créditos para el pago de deudas o para inversión, porque las tasas rozan el 100% anual, el consumo cae en picada y que aún en un marco de estanflación hará que la inflación antes del fin de año llegará casi al 45%. Además todos los sectores productivos registran una caída brutal en la producción, como el caso de la producción industrial que solamente en el mes de septiembre tuvo un retroceso del 11%, marcando el segundo peor registro del siglo XXI, después de septiembre 2002 (atravesado por los coletazos de la gran crisis del 2001).
En tres años de gobierno no hubo más que contracción de la economía real y caídas del PBI en el 2016 (2,3%) e incierta para el 2018, cuando aún faltas computarse los últimos dos meses del año, y acaso sea también el trimestre más recesivo.
- “Los trabajadores no van a pagar impuestos a las ganancias”: Sucedió lo contrario. Contabilizando los dos primeros años de gobierno, se sumaron al pago de ganancias otro millón doscientos mil trabajadores. Si en campaña Macri habló de su eliminación, la realidad fue que en tras la reforma tributaria del 2016 quiénes si vieron reducido su pago de ganancias fueron las empresas.
- “Mejoras al funcionamiento de la Administración del Estado”: Todas las respuestas de este gobierno marcaron una regresión en los servicios estatales: Recorte de programas Nacionales de Salud; quita de medicamentos y prestaciones a jubilados; un ajuste al Presupuesto de unos 650.000 millones de pesos (compromiso déficit cero); recorte en la obra pública de casi 92.000 millones de pesos; en Educación las partidas mermarán en 10.000 millones de pesos y las de Salud otros 2.000; en las políticas de Vivienda y Desarrollo urbano la quita rondará los 8.000 millones de pesos; caída de Asignaciones Familiares en un 3,7% y de Pensiones al Adulto Mayor en otro 6,4%; recorte de un 18% en los Subsidios al desempleo y 600 millones de pesos en los programas de creación de empleo; recortes en el envío de partidas a las provincias por 110.000 millones de pesos y se traspasan a cada jurisdicción los subsidios de la tarifa social eléctrica y del transporte automotor; respecto a los trabajadoras/es del Sector Público, las variables van desde un recorte del 18,8 % de su salario o una reducción de la planta de ocupados (hasta el año 2020 cuando vence el acuerdo) que afectaría a cerca de 140.000 trabajadore/as.
Macri y “los culpables de la crisis”
Para justificar una y cada una de sus mentiras Macri ha encontrado en el camino diversos responsables causantes de las crisis de gobierno. A saber: crisis monetaria en Turquía; los que veranean en el exterior; los cuadernos de la corrupción; el PJ; el kirchnerismo; los inversores no llegaron porque el país no tiene estabilidad y déficit fiscal; la crisis de confianza de los inversores; la guerra comercial EEUU- China; la depreciación de las monedas y fortalecimiento del dólar; el aumento de la tasa en EEUU y refugio para los inversores; que Argentina tiene muchos impuestos (aunque para alcanzar el “déficit cero”, solo un día después dispuso otro) y eso imposibilita la inversión; y las “bombas” de las Lebac /(reemplazadas ahora por otra bicicleta financiera llamadas Leliq que no en mucho tiempo será otra de sus nuevas excusas).
Alejandro Asis