Asociación Trabajadores del Estado

1 de 3 fotos - Ver galería

Marchamos al 36º Encuentro Plurinacional de Mujeres y Disidencias

Este año, ‘el Pluri’ se realizará los días 14, 15 y 16 de octubre en la provincia de Rio Negro y, como en cada año, las estatales estarán presentes. Por primera vez, gracias a la modificación del estatuto de ATE, irán secretarias de Género, que se incorporarán a las comisiones directivas a partir del 6 de noviembre. Asimismo, por la obligación de paridad y alternancia, se multiplicarán las secretarias generales y adjuntas. “Es un gran logro, es la viva muestra de la organización de las mujeres trabajadoras sindicalistas”, considera la primera secretaria general de ATE Rosario –reelecta-, Lorena Almirón.

“En este momento en donde algunas conquistas son cuestionadas por sectores reaccionarios, la incorporación de las disidencias sexuales y las múltiples identidades nacionales al Encuentro son una oportunidad para la defensa de nuestros derechos”, explica Almirón. “Desde el sindicato consideramos fundamental la presencia de nuestras compañeras en los debates y consensos sobre la agenda feminista actual. Además, responde con uno de los ejes del Programa de Igualdad Sindical de Oportunidades (PISO), que apunta a fortalecer las capacidades gremiales de nuestras compañeras, fomentando la participación en encuentros de formación y actualización política”, aclara.

Un lago de herramientas

Con una clara impronta unitaria, dado que este año se confluirá en un solo espacio de carácter plurinacional y diverso, compañeras de distintos puntos de Santa Fe van camino a esta instancia transformadora para cada persona que participa. Lo harán en la ciudad del inmenso lago Nahuel Huapi, zona donde las comunidades originarias siguen sufriendo el peso del racismo y la exclusión que inició 531 años atrás.

Para Griselda Brest, asistente escolar del Jardín Juanito Laguna de Villa Gobernador Gálvez, es su primer encuentro y viaja con una maleta repleta de ganas de conocer otras realidades. “La situación económica y social sin duda nos afecta en especial a mujeres y diversidades, por eso creo más que necesario reunirnos a debatir y encontrarnos, para fortalecernos como colectivo y buscar estrategias para confrontar nuestras problemáticas”.

Mónica Orrego, enfermera del Hospital Carlos Goytia de Carcarañá va “en busca de herramientas” para dar batalla contra “la sociedad machista” en la que, pese a los avances, “hay muchos femicidios”.   

Desde Reconquista, Nora Díaz cuenta: “mi expectativa es enorme porque es el primer encuentro en el que voy a participar. Quisiera unirme  a la mayor cantidad de talleres, los sindicales son los que más me interesan”. Sobre la coyuntura, analiza que “estamos luchando para lograr igualdad en todos los sentidos, creo que  nos falta más trabajo en algunas cuestiones, luchas, calle, protestas, para lograr el lugar que nos merecemos. Las personas que son del colectivo de la diversidad son las que más sufren esta situación. A la falta de recursos, dinero, trabajo, etcétera, se suma a la no aceptación que demuestra una gran parte de la sociedad”.

Sobre el rol de las mujeres sindicalistas, considera que “es de tratar de cambiar la cultura de las, los, les compañeras/os/es. Educar y enseñar a vivir en los distintos lugares de trabajo. Ayudar a defenderse y defender a todos/as/es de igual manera. Acompañar a los más vulnerados para cambiar de una vez por toda la mentalidad de algunos seres humanos. Para que acepten a todos/as/es tal y como son”.

Florencia Escandar, trabajadora de la Colonia Psiquiátrica de Oliveros, valora que “como siempre, el feminismo y las disidencias logramos soltar las contradicciones y volvemos al territorio cada vez siendo más. Así avanzamos con derechos. Hay temas sensibles que nos afectan y sobre ellos construimos”. A la hora de resaltar los principales problemas, señala el ajuste del FMI que repercute en la salud y atención a cuestiones de géneros. Además, expresa preocupación por el avance del fascismo y el negacionismo sobre las personas desaparecidas, torturadas y secuestradas en dictadura y el robo de niñes. “Intentando borrar esa historia, nos convocan a levantar la bandera de la igualdad y encontrarnos en el Plurinacional para emprender luchas en todo el territorio”.

Ya en viaje desde Granadero Baigorria, Marisa Vachet, asistente escolar del Hogar Escuela Nº 9020 y referenta del Grupo de Mujeres ATE en la delegación, destaca como objetivo “aprender de las demás mujeres que hicieron grandes esfuerzos para estar en el encuentro, poder alzar su voz, para ser escuchadas y poder traer herramientas para solucionar sus problemas. Porque los encuentros son potencia, cada compañere nutre ese momento con su voz, su grito de lucha esa hermandad que se logra, y poder entre todes encontrar una salida a esta crisis”.

Acerca del rol que le cabe a los sindicatos señala “garantizar la participación política de las mujeres y diversidades en los espacios sindicales altamente masculinizados, lo que implica en forma efectiva de paridad llegar a los lugares de toma de decisiones, discutir sobre el reconocimiento del trabajo remunerado o no que realizan y la prevención de las violencias por razones de género”.

Liliana Leyes, actual secretaria de Organización y electa Secretaria de Género y Diversidad de ATE Rosario, apunta que “vamos al Encuentro Plurinacional a una provincia donde la lucha de las comunidades originarias viene dándose con una feroz represión por parte del Estado hacia nuestras hermanas mapuches. Han sido encarceladas, torturadas, violentadas. La reparación a los siglos de persecución jamás llegó para ellas, por eso estamos yendo más de 100 mil mujeres y disidencias a abrazarlas, escucharlas y a decir basta de persecución al pueblo Mapuche”.

“Este momento político, a días de las elecciones presidenciales, es precisamente el momento en que también vamos a marcar nuestra posición frente a la avanzada de la derecha, la interseccionalidad política nos permite analizar el marco de desigualdad en que nos seguimos encontrando desde el Movimiento Lesbotransfeminista en el plano social y económico, desempleo, precarizacion laboral, brecha salarial. Todo esto se profundiza con la grave violencia social que destapa la ultraderecha y sus candidatos”, profundiza.

Con la mirada puesta en organizar resistencia y acción, las mujeres trabajadoras serán clave para la transformación social que no es sólo un deseo, sino un imperativo para la supervivencia de una humanidad degradada y una civilización en crisis.

A modo de cierre, Liliana adelanta: “son los sindicatos las trincheras organizadas desde donde presentaremos las grandes batallas. El sábado estaremos miles, cientos de mujeres lesbianas, trans, travestis, bisexuales, intersex no binaries, abriendo el 36º año de encuentros que son únicos en el mundo, con desafíos amplios y profundos que en el contexto actual. No lo vamos a desaprovechar porque no estamos dispuestas a ceder ni un derecho ganado en las calles, no estaremos ni un paso atrás, sí de pie, riendo, flameando banderas, abrazadas, gritando ¡¡fuera la derecha de Argentina y América Latina!!”.

Equipo de Comunicación ATE Rosario